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La sensibilidad digestiva no es una enfermedad ni una patología, es un aumento en las deposiciones de materia fecal que pueden ser blandas o líquidas. Son mucho más frecuentes de lo normal y a veces, están acompañadas de mal olor debido a una mayor generación de gases en el intestino.
Se puede llegar a confundir con una pancreatitis, colitis o con una inflamación gastrointestinal; estas patologías, a diferencia de la sensibilidad, sí son evaluables por un médico veterinario. Además, es recomendable comenzar un tratamiento nutricional para el perro.
Si bien, la sensibilidad digestiva no es una patología, puede llegar a serlo cuando el perro hace deposiciones tan frecuentes que comienza a botar la flora y mucosa intestinal, por esto puede desarrollar síntomas como diarreas esporádicas acompañadas de pintas de sangre que pueden generar otro tipo de enfermedades gastrointestinales.
contienen una cantidad considerable de conservantes que les puede desarrollar gastritis o gastroenteritis. A su vez puede ocasionar diarrea y presentarse una baja en las defensas, lo que propicia el crecimiento y proliferación de las bacterias, haciendo que se produzcan infecciones.
contienen sustancias que no son metabolizadas por perros y les produce un grado de toxicidad y de acuerdo a la cantidad que haya comido se presentan síntomas leves o graves, por lo general se manifiesta como un tipo de intoxicación.
no son absorbidas por el organismo , lo que puede ocasionar que el bolo fecal se agrande por la cantidad de líquido que contienen. Esta situación a largo plazo podría llevar a una intoxicación y otras afecciones.
son ricos en grasas que se acumulan en el cuerpo y son difíciles de eliminar, metabolizar y asimilar, por lo que se comienza a formar depósitos que generan gases, producen malestar y cólicos. En ocasiones se hace necesario consultar al veterinario.
son difíciles de absorber o digerir y no funcionan como fibra sino que a veces generan dentro de su descomposición fenoles y alcoholes que son perjudiciales para los perros al volverlos flatulentos. Sin embargo, también existen granos y cereales beneficiosos que ayudan a un buen movimiento intestinal como la semilla de chía o arveja que se encuentra en el concentrado de Ringo Vitality.
Fuentes
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