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Los perros sin hogar viven en una situación vulnerable que pone en riesgo su salud y bienestar a diario. Los peludos, que a menudo han sido abandonados o nacidos en las calles, enfrentan múltiples peligros que pueden afectar gravemente su calidad de vida. En este artículo, exploraremos algunos de los riesgos más comunes a los que se exponen los perros callejeros y cómo podemos ayudarlos desde una perspectiva de tenencia responsable.
Uno de los mayores problemas que enfrentan los perros sin hogar es la falta de acceso regular a alimentos. Sin una fuente constante de comida, suelen sufrir de desnutrición, lo que debilita su sistema inmunológico y los deja vulnerables a enfermedades. La desnutrición también afecta su capacidad para soportar condiciones climáticas extremas, lo que pone en peligro su vida durante el invierno o el verano.
Los perros callejeros están expuestos a una amplia gama de enfermedades y parásitos debido a su entorno insalubre. Sin acceso a atención veterinaria, estas enfermedades a menudo quedan sin tratamiento, lo que puede llevar a sufrimientos prolongados e incluso a la muerte. Parásitos como pulgas, garrapatas y lombrices son comunes entre los perros de la calle y contribuyen significativamente a su mal estado de salud.
Vivir en la calle significa que los perros sin hogar están constantemente expuestos al peligro de accidentes. Los atropellos por vehículos son una amenaza constante, al igual que las lesiones causadas por peleas con otros animales o el maltrato por parte de personas. Estas lesiones, muchas veces graves, quedan sin tratamiento adecuado, lo que puede llevar a infecciones y complicaciones fatales.
Los perros sin hogar no tienen refugio donde protegerse del calor extremo, el frío intenso o las lluvias torrenciales. El clima extremo es especialmente peligroso para los perros de avanzada edad, los cachorros y aquellos que ya están enfermos o desnutridos. Las temperaturas extremas pueden causar hipotermia, insolación entre otros.
Además de los peligros físicos, los perros sin hogar también sufren emocionalmente. La soledad, el miedo constante y la falta de contacto humano positivo les generan altos niveles de estrés. El estrés crónico puede llevar a comportamientos agresivos o retraídos, haciendo que sea aún más difícil para ellos sobrevivir en la calle y encontrar un hogar.
Perruno, te dejamos algunas formas en las que puedes contribuir a mejorar la vida de los peludos necesitados:
Perruno, los perros sin hogar enfrentan innumerables peligros que amenazan su vida y bienestar cada día. Adoptar es una forma maravillosa de hacer la diferencia. ¡Adopta y cambia una vida hoy para toda la vida!
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