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Perruno, detectar el embarazo en tu perra puede ser importante para proporcionarle los cuidados necesarios durante esta etapa tan importante. Pero si aún no sabes cuáles son las señales del embarazo en perros, aquí te contamos.
Cuando se trata de perros, el embarazo dura entre 61 y 65 días, divididos en tres trimestres de aproximadamente 21 días cada uno. Aunque los cambios físicos pueden no ser evidentes en las primeras etapas, hay varios signos que pueden indicar que tu perrita está embarazada.
Uno de los primeros signos de embarazo en una peluda es la disminución del apetito. Similar a los humanos, algunas perras experimentan náuseas matutinas durante las primeras dos semanas de gestación. Esto puede manifestarse como una resistencia a comer o vómitos ocasionales. No te alarmes si tu perra deja de comer durante un par de días, pero si el problema persiste, consulta a un veterinario.
Una perra embarazada puede mostrar una disminución en su nivel de actividad. Aunque es normal que los perros tengan días más tranquilos, una reducción notable y constante en su energía podría ser un indicio de embarazo. Durante esta etapa, tu perra necesitará conservar energía para lidiar con los cambios internos y prepararse para el parto.
El desarrollo de los senos es un signo claro de que tu perra está embarazada. Sus pezones, normalmente pequeños y planos, comenzarán a crecer y a volverse rosados debido al aumento del flujo sanguíneo. Este cambio suele ser visible a las dos o tres semanas de gestación. Además, su abdomen empezará a agrandarse, especialmente durante el segundo y tercer trimestre.
Las perras embarazadas tal vez muestren cambios significativos en su comportamiento. Algunas se vuelven más cariñosas y buscan la compañía de sus dueños, mientras que otras prefieren la soledad y pueden mostrarse más gruñonas. Estos cambios de comportamiento pueden ser uno de los primeros signos de embarazo y suelen hacerse más evidentes con el tiempo.
A medida que el parto se acerca, es probable que tu perra empiece a mostrar comportamientos de nidificación. Buscará un lugar seguro y cómodo para dar a luz y pasar más tiempo en ese lugar. Observa si tu perra pasa más tiempo en un área específica de la casa o si lleva objetos a su cama.
Es fundamental que lleves a tu perra al veterinario si sospechas que está embarazada. El veterinario puede realizar una ecografía o una radiografía para confirmar el embarazo y verificar la salud de los cachorros. Además, cualquier síntoma inusual, como sangrado abundante, moco con manchas de sangre o mal olor, debe ser evaluado por un profesional para descartar infecciones o complicaciones.
Perruno, te recomendamos observar atentamente los signos mencionados y consultar a un veterinario para confirmar el embarazo y recibir orientación sobre cómo cuidar a tu perra durante esta etapa.
Por otro lado, si no quieres camadas indeseadas, en este artículo te contamos cómo cuidar a tu perrita durante su periodo de celo. Recuerda que la esterilización es otra manera de evitar que tu perra quede embarazada, conoce más aquí.
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